Fecha: Viernes 13 de diciembre de 2019 | Hora: 21 hs. | Ciudad: Buenos Aires | Lugar: Movistar Arena | Banda soporte: AGAINST
Un crimen perfecto
Una vez más DREAM THEATHER dijo presente en la Argentina y a diferencia de otras oportunidades, lo hizo ejecutando por completo su emblemático álbum “Metropolis Pt. 2: Scenes From a Memory” (20 años no los cumple cualquiera) y algún que otro tema más en el inicio del show como para descontracturar algunas nucas. Los discos elegidos para acompañar al presente fueron su más reciente “Distance Over Time” (del cual hicieron unos cinco temas), “Black Clouds & Silver Linings” y un toque de “Systematic Chaos”. Cosa extraña si las hay, con disco nuevo bajo el brazo, pero bueno… DT ha sido una banda muy cambiante, no solo en estudio, sino también en sus esquemas funcionales, aunque mantengan el eje de muchas bandas progresivas de tocar un álbum conceptual por completo de pe a pa. Es más, ya habían hecho este exacto set en Argentina en el 2005 si mal no recuerdo, con lo cual el carácter novedoso y distinto se cayó por los cuatro costados.
El lugar elegido fue el Movistar Arena, un lugar hermoso para convocantes shows como este. Debo contarles que no había entrado nunca y el lugar me pareció bárbaro. Un espacio bien yankee, pero con una vista de primera desde donde estés, aunque no así con el sonido (de acuerdo a algunos comentarios que recibí). Cuestión de que desde donde nosotros los vimos, casi pegado al escenario, estuvo de primera. Así que nos adentramos en lo que tengo para contarles.
Los locales elegidos para dar inicio al show fueron los en crecimiento AGAINST, a los cuales si bien no pudimos ver, nos dijeron algun os amigos presentes, que estuvieron a la altura de la circunstancia. Ya hemos hablado de ellos en sendas oportunidades, así que en esta discúlpennos muchachos. Cuestión que con un recinto bastante lleno (no colmado) se daría con la llegada de la banda para un show de tres horas reloj. Tremendo, parecía que no terminaba más. De todas maneras fue siempre disfrutable.
La historia arrancó un tanto desencajada desde el sonido, pero mejoró de toque. Con la banda ya dispuesta sobre el escenario nunca me dejó de llamar la atención tanta ostentación de movimientos por parte de su batero Mike Mangini (hubiese estado bueno que toque un toque la batería también en “Through Her Eyes”) y el virtuosismo perfecto, sin fallas ni errores del grandísimo Petrucci. LaBrie estuvo muy bien, aunque su voz ya no es la misma de antes, la que no solo evidencia el paso del tiempo sino también me parece demasiado mucho un show de estas dimensiones para él, que se yo, igual tiró, pero con cansancio más que demostrable.
El show fue un calco del disco, casi a la perfección. Lógicamente que tuvo sus puntos más relevantes en los temas más emblemáticos o al menos eso nos dejó ver la gente con su euforia, pero a decir verdad tampoco me retiré del mismo extasiado. Los solos y la performance de Mike y John realmente fueron geniales, pero ya demasiados exagerados por momentos, aunque tengan con que, tal cual fue el caso por sobre todo del batero. Pero más allá de eso, es un show y de eso trata, de dejar a la gente deslumbrada y ellos lo hicieron. Me parecieron geniales las imágenes de fondo que iban migrando a medida que ellos tocaban, lo que en definitiva no hizo más que mostrar en detalle y por completo la película de cada escena la cual se desarrolla en dos actos diferentes y con seis personajes.
De hecho, sin ir más lejos, Scenes From a Memory es un álbum conceptual que narra una única historia, acerca de un joven que descubre su pasado, el cual está relacionado con el amor, asesinato e infidelidad de Victoria Page. Como el nombre puede sugerir, Metropolis Pt. 2: Scenes From a Memory es una secuela que sigue la historia de Metropolis Pt. 1: The Miracle And The Sleeper, la quinta canción del segundo álbum de la banda: Images and Words. Aún así, cuando llamaron Metropolis Pt. 1 a la canción original, no tenían en mente hacer una historia épica dividida en dos partes, pretendía ser simplemente una broma. Solamente tras continuas peticiones de los fans, empezaron a trabajar en la segunda parte. Inicialmente, comenzaron a desarrollar esa segunda parte para incluirla en una sola canción, en lugar de un álbum completo. Fue durante las sesiones de grabación del cuarto disco del grupo, Falling Into Infinity, en 1996-1997 cuando empezó a tomar forma. La canción no fue definitivamente incluida porque la compañía discográfica para la que trabajaban no quería publicar un álbum doble (que sería necesario ya que no habría espacio suficiente en 80 minutos junto al resto de canciones). De cualquier manera, grabaron un demo con Derek Sherinian en los teclados para retornar a ese proyecto más adelante. Cuando empezaron a trabajar en su quinto álbum, recuperaron la canción que evolucionó hasta convertirse en un álbum completo y que coincidió con el debut del tecladista Rudess (un crack) en la banda también.
Cuestión que tuvimos una sesión completa de Scenes después de haber esperado como media hora una vez que finalizaron el set principal y fue recontra valedero. A mi particularmente me gustaría que hagan lo mismo con lo que para mi son los dos mejores discos de la banda, “Images and words” & “Awake”. Pero claro, son solo gustos y ambos ya no reflejan mucho de lo que la banda hace desde hace varios años a la fecha. Se han zarpado de tecnicismo y virtuosismo. Lindo show, lindo lugar, linda banda aunque debo decir que sigo sin extrañar a Portnoy. Tranqui, entre sus quichicientas bandas él está bien.
Texto: Hernán Mazón
Fotografía: Estanislao Aimar
Agradecemos a Gaby Sisti Press por la acreditación al evento.
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